Mitsubishi ASX de segunda mano

El Mitsubishi ASX apareció en el mercado en 2010. El coche se creó en colaboración entre la marca japonesa y la empresa francesa PSA. Dos años después, el SUV recibió un lavado de cara, que se tradujo en ligeros cambios en ambos parachoques. Otras modificaciones llegaron con la actualización de 2016. Esta vez fueron un poco mayores: una nueva forma del frontal del coche, materiales cambiados en el interior y un volante diferente son sólo algunas de ellas. En 2019, el coche recibió otro lavado de cara. Supuso otra remodelación del frontal, así como nuevas cubiertas de los faros en la parte trasera. En 2022, se presentó la segunda generación del coche, cuyas ventas están previstas para 2023.

Interior minimalista y elegante

Como corresponde a un coche japonés, el diseño interior del Mitsubishi ASX está muy cuidado. En el habitáculo predomina el minimalismo. Como resultado, los botones más necesarios están siempre al alcance de la mano. En muchos ejemplares del SUV no encontrarás el clásico contacto, sino un sistema de acceso sin llave. Basta con pulsar un botón para arrancar el coche. El interior del Mitsubishi ASX tiene un aspecto sencillo pero llamativo gracias a los elegantes relojes. Su alto contraste y los detalles plateados aportan claridad y un aspecto interesante. En los relojes puedes leer fácilmente la información más necesaria, como el kilometraje diario o la temperatura exterior. Un techo panorámico de cristal añade carácter al interior. Cuando oscurece, se puede iluminar con luces LED para darle un toque realmente interesante e inusual.

Óptimo confort de conducción

El Mitsubishi ASX es un SUV que proporciona confort tanto al conductor como a los pasajeros. En ello influye, entre otras cosas, el hecho de que vas sentado bastante alto en el coche. Esto, a su vez, se traduce en una entrada y salida fáciles, así como en una posición cómoda también en la banqueta trasera. El conductor, por su parte, apreciará la posición elevada, que proporciona una mejor visibilidad y una maniobrabilidad más eficaz. Los asientos son ergonómicos y cómodos. Los pasajeros traseros también apreciarán el amplio espacio para las piernas. Esto también se aplica a la persona sentada en el centro, ya que el túnel central es bajo y no causa molestias.

¿Qué motores propulsan el Mitsubishi ASX?

En la primera generación del modelo, había dos motores de gasolina y cuatro diésel entre los que elegir. Los primeros ofrecen una potencia de 117 a 150 CV y una velocidad máxima de 183 a 190 km/h. Para los motores diésel, las prestaciones máximas van de 114 a 150 CV. Las unidades más potentes aceleran hasta 200 km/h y necesitan 9,7 segundos para alcanzar los 100. En la segunda generación, el fabricante ha tenido la tentación, entre otras cosas, de añadir un sistema de propulsión híbrido. Los motores del Mitsubishi ASX funcionan con transmisión manual, caja de cambios EDC o CVT.

Placer de conducción

El Mitsubishi ASX se distingue por sus muy buenas características de conducción. El coche responde con precisión a cada movimiento del volante, y la óptima puesta a punto de la suspensión compensa la sensación de pavimento irregular. El coche también se conduce bien por la noche gracias a sus faros de xenón gran angular. El resultado: mejor iluminación de los laterales de la carretera y la acera.

Un SUV seguro en el que puedes confiar

En una prueba de choque independiente realizada por la organización Euro NCAP, el coche recibió la máxima calificación de cinco estrellas. No es de extrañar: el coche se construyó para proteger perfectamente al conductor y a los pasajeros en caso de colisión. El SUV tiene siete airbags, para que todas las personas que viajen en el coche estén totalmente protegidas. A su vez, el pasajero delantero y el conductor están protegidos adicionalmente por airbags laterales y frontales. Además, el conductor dispone de un airbag en la zona de las rodillas. En caso de impacto lateral, todas las personas del coche están protegidas gracias a los airbags de cortina.

Tecnologías de apoyo al conductor

El Mitsubishi ASX es un coche moderno en el que encontrarás un impresionante conjunto de tecnologías que mejoran el confort y la seguridad de la conducción. Entre ellas hay un sistema de ayuda al arranque en pendiente. En el lado positivo, también hay un robusto sistema de estabilidad. Proporciona estabilidad y control total incluso sobre pavimento resbaladizo y mojado. El sistema controla eficazmente el deslizamiento lateral de las ruedas delanteras y traseras. Se complementa con una opción de control de tracción. Aunque una de las ruedas pierda tracción, la conducción seguirá siendo suave y dinámica.

Espacio de carga amplio y funcional

El Mitsubishi ASX tiene un maletero grande, funcional y bien diseñado. En los laterales encontrarás compartimentos portaobjetos para objetos pequeños. El doble fondo te permite planificar mejor el espacio. Debajo encontrarás un compartimento de almacenamiento adicional para evitar que los objetos pequeños se deslicen mientras conduces. Con los asientos abatidos, el maletero tiene una capacidad de 419 litros, y cuando están plegados, hasta 1219 litros. Abatir la banqueta trasera lleva literalmente un momento: un movimiento de la mano desde el nivel del maletero es suficiente para conseguir un espacio de carga bastante plano y espacioso. En el día a día, apreciarás los prácticos ganchos donde puedes colocar la compra. Es un pequeño detalle que marca una gran diferencia. Te darás cuenta cuando tus compras no estén desperdigadas por el maletero al abrir la trampilla. En el lado positivo, el umbral de carga también es bajo, por lo que no tienes que levantar mucho el equipaje o las bolsas de la compra.

¿Cómo se comporta el Mitsubishi ASX fuera de la carretera?

El Mitsubishi ASX es definitivamente un coche urbano, pero también puede desenvolverse en terrenos moderadamente difíciles si es necesario. Con la opción de tracción a dos ruedas, superará fácilmente roderas, barro o caminos de grava en mal estado. El coche en su punto más bajo tiene, según la variante, de 18 a 19 cm de altura libre al suelo, lo que es un resultado realmente bueno. También apreciarás esta característica en ciudad, por ejemplo, al subir bordillos altos.

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